Hoy amanecí melancólica y me dispuse a escribir unas líneas dedicadas a TODOS los que he perdido. Unos son cercanos, otros no, pero TODOS tocaron mi vida.
A lo largo de nuestras vidas tenemos ciertos aprendizajes que a otros parecen inverosímiles, sin embargo, eso no significa que no seamos capaces de cambiar, sobre todo, cuando se trata de celebrar un cumpleaños.
Cuando uno se aventura a migrar de la tierra que lo vió nacer, no somos conscientes que las burocracias del mundo pueden no ser tan benévolas como nosotros deseáramos.